Gastronomía

La gastronomía de Austria, distinguida y deliciosa, no es muy conocida internacionalmente, pero es ideal para saborear en caso de una visita al país. La cocina austríaca suele ser muy sustanciosa, de sabores fuertes y platos robustos.

Algunas especialidades en cuanto a platos incluyen:

- El Wiener Schnitzel: un plato nacional a base de pan y escalopes de ternera.

- El Knödel: una clase de guiso que puede ser dulce o salado de acuerdo con el gusto.

- El Tafelspitz: bife hervido con papas y ensalada.

- El Apfelstrudel: el famoso strudel o pastel de manzana.

- El Kletzennuldeln: una especialidad de fideos rellenos de peras secas y queso suave.

- El Kernöl: una variedad de ensaladas con aceite de calabaza, de un sabor delicioso y característico. Las botellas son caras pero recomendables.

- Manner Schnitten: una variedad de dulces muy tradicionales.

- Sachertorte: una torta tradicional de chocolate rellena de mermelada de ananá que suele servirse con una porción de crema.

En cuanto a las bebidas, Austria tiene una diversidad de cafés impresionante y definitivamente sugerente para probar si visitás un bar o café de los que abundan, especialmente en Viena. El Kleiner Schwarzer es un café negro, el Grober Brauner, un café grande con crema, el Kaisermelange lleva leche, ponche de huevo y cognac, entre otras.

Las variedades de vino también son famosas en el mundo, sobre todo los vinos blancos y un poco ácidos. En ocasiones el vino se mezcla con agua mineral, combinación llamada “Spritzer”.
Una bebida nacional austríaca es el Almdudler, a base de hierbas, muy suave. Otra similar es el Holler o Hollundersaft.

Los restaurantes austríacos son los Gasthaus, que sirven comida tradicional a precios económicos, incluyendo sopa y a veces postre por alrededor de 5 ó 7 euros